¿Has sentido alguna vez mariposas en el estómago cuando alguien te dice «tenemos que hablar»? Un experto en psicología nos explica que esto es completamente normal pero que conversar sobre nuestras preocupaciones es muy importante para sentirnos mejor. ¡Es como cuando destapas una olla a presión: al principio da un poco de miedo pero luego todo está más tranquilo!
¿Sabías que cuando discutimos de forma respetuosa con alguien nuestro cerebro trabaja como un científico buscando soluciones? Los investigadores han descubierto que las personas que hablan sobre sus problemas en lugar de guardarlos tienen relaciones más felices y duraderas con familia y amigos. La clave está en escuchar al otro y expresar lo que sentimos sin gritar ni enfadarnos.
¿Y qué pasa si no encontramos las palabras perfectas en el momento? ¡No pasa nada! Es como cuando estás haciendo un examen y la respuesta correcta se te ocurre al salir de clase. Los expertos nos dicen que siempre podemos retomar la conversación más tarde, cuando hayamos pensado mejor lo que queremos decir. Lo importante es mantener la calma y recordar que hablar nos ayuda a entendernos mejor. (HuffPost)
Deja una respuesta